En nuestra búsqueda por tener mejor salud y bienestar usualmente terminamos evaluando nuestro estado por las cosas que vemos en redes sociales o por estereotipos que se nos han vendido como ejemplos de buena salud y belleza. Lamentablemente esto nos lleva a hacer cosas extremas para lograrlo aún por encima de lo que realmente es nuestra salud.
Por lo tanto, aprovechando que realmente todavía estas a tiempo de hacer ajustes a tus propósitos de este año, te invitamos a que te asegures de qué es verdaderamente lo que estas buscando, y por lo que te estas esforzando, para crear nuevos hábitos para alcanzar una vidafit.
1. No necesitas un abdomen “six pack”. Si necesitas una buena digestión.
Enfocarte solo en que se vean los abdominales, pero seguir con problemas digestivos como estreñimiento, hinchazón, pesadez, etc. no tiene sentido. Apunta mejor en buscar reparar tu intestino y, sin dietas extremas ni miles de abdominales, no solo tu abdomen sino todo tu cuerpo se desinflamara y aunque no se vean todos los músculos si tendrás una apariencia más plana y por supuesto, saludable.
2. No necesitas un bajo nivel de grasa corporal. Si necesitas hormonas balanceadas.
Otro estándar de salud distorsionado es considerar que un físico extremadamente definido es saludable. Lo cierto es que para que sea así se requiere de porcentajes de grasa muy bajos, y esto termina afectando tus hormonas. Según el dietista Georgie Fear: “Un porcentaje de grasa inferior al 5% está relacionado con síntomas de salud pobre, incluso entre atletas de élite”. Ten en cuenta que cuando desciende mucho la grasa corporal, en las mujeres se reduce la capacidad de producir hormonas femeninas como los estrógenos y en el caso de los hombres desciende la producción de testosterona.
3. No necesitas un «trasero gigante». Si necesitas buena movilidad.
Lo del trasero es solo un ejemplo para que lo apliques a la parte de tu cuerpo por la que te obsesionaste con tener de cierto tamaño o forma. La verdad es que eso no es sinónimo de saludable, aunque lo hagas a punta de ejercicio, y pues es obvio que si para lograrlo tuviste que recurrir a la cirugía o a inyectarte cosas, pues mucho menos. El peligro de esas tendencias es que, aunque visualmente a algunos les parezcan agradables es probable que tu cuerpo este desbalanceado y con el paso de los años es que los problemas aparecen. Así que enfócate mas que en lograr un tamaño o forma de algo, en que tu cuerpo mantenga la movilidad adecuada y por supuesto la postura correcta.
4. No necesitas dormir 8 horas. Si necesitas dormir en el horario adecuado.
Usualmente solo contamos las horas de sueño sin importar nada más. Por eso creemos que acostándonos a la 1 am y levantándonos a las 9 am cumplimos y estamos siendo saludables. Pero la verdad es que el cuerpo está diseñado para funcionar mejor de acuerdo con el ciclo circadiano, es decir, con relación a lo que sucede alrededor de un día (luz/oscuridad). Algunos problemas a corto plazo de tener un horario descuadrado son, aparte de los síntomas de cansancio y torpeza durante el día, cambios de humor y hasta principios de depresión; y a largo plazo problemas físicos y metabólicos como la diabetes, la acumulación de grasas, enfermedades coronarias o síndrome metabólico. Así que encamina tus esfuerzos en organizar tu reloj interno, el cual es bastante adaptable, en lugar de solo contar las horas.
5. No necesitas tener una cara libre de arrugas. Si necesitas tener vitalidad.
Si, aunque todos quisiéramos que no se nos noten el paso de los años es algo inevitable. Así que mas que usar mil cremas o hacer de todo por lograr verte “joven”, busca tener hábitos y disciplinas que te ayuden a mantenerte con el vigor físico y anímico conforme a tu edad, para vivir cada año de vida para glorificar a Dios y amar a otros mientras los vives.
Ahora para terminar, considera que muchas de estas mentiras que hemos creído sobre lo que necesitamos lograr o tener en una vidafit se deben a que ciertamente lo que queremos es la aprobación y admiración de las personas más que nuestra salud y bienestar. Por eso ten en cuenta siempre que:
«…todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres«.
Colosenses 3:23
Esperamos que estas cinco cosas te ayuden a revisar qué otras cosas crees que son reflejo de salud y bienestar, pero no lo son, y te animes a contárnoslas en comentarios para que todos podamos reflexionar al respecto.